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Quiénes somos, nuestra identidad

El colegio, inserto en la pastoral eclesial , perteneciente a la Diócesis de Azul y al sistema educativo de la Provincia de Buenos Aires se propone la  formación  del alumno en todas sus dimensiones, teniendo como norma educativa los principios evangélicos. Esto significa el desarrollo de todas las facultades humanas, la preparación para la vida profesional y para el ejercicio de la soberanía democrática, la asimilación de la cultura a la luz de la fe, la capacitación en el recto juicio y la apertura a la trascendencia, la reafirmación de la soberanía e identidad nacional, basada en el respeto a la diversidad cultural, a los derechos humanos y las libertades fundamentales.    

        

Con la transmisión de los valores cristianos buscamos generar actitudes humanas y comportamientos que tienen que ver  con la libertad respetuosa hacia los demás, la solidaridad, la paz, la justicia y el servicio comunitario.

 

Nos proponemos contribuir al fortalecimiento del valor de la vida humana desde la concepción hasta la muerte natural, de la complementariedad física, moral y espiritual del varón y la mujer, y de la institución familiar basada en la unión estable del varón  y la mujer, abierta a la procreación y a la educación de los hijos.

 

Estamos de acuerdo en que la sexualidad humana es un don y una tarea que requiere ser educada para el amor para que adquiera una auténtica calidad humana. El amor  deriva en una comunión fecunda tanto física como espiritual.      

                  

Aspiramos a que el mundo sea el lugar donde los hombres dialoguen entre sí y se hermanen en un esfuerzo común para construir una sociedad más justa y solidaria.

 

Creemos que sólo en interacción con el otro, siendo sensibles a sus necesidades y problemas, podrá cada alumno autoconstruirse concretando su misión trascendente de ser hijo de Dios.

    

Desde la perspectiva pedagógico institucional, adoptamos los principios y valores de la democracia, entendida ésta en su verdadera esencia, su significado y su práctica.

 

 

El respeto por las diferencias individuales y culturales es otro aspecto rector de nuestra institución: cada alumno es considerado como ser único y merecedor de una atención personalizada.

                 

La comunicación es la base de la convivencia. Desarrollar la buena calidad de escucha, el registro y la aceptación de lo que el otro dice y los mensajes claros son imprescindibles para el trabajo institucional

 

Descartamos toda forma de abuso o maltrato.

 

En el ámbito académico pretendemos que los alumnos alcancen una formación sólida y amplia que les permita desenvolverse sin problemas en el mundo del trabajo o en el ámbito universitario.

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